Un puente Bailey, de 36.5 metros de largo, tendido sobre el río Dumarí, en el sitio Limón Playa, de la parroquia Cerro Azul, cantón Atahualpa, permite que decenas de agricultores y ganaderos, que tienen sus animales y sembríos del otro lado del afluente, puedan sacar sus productos y comercializarlos.
Antes, los campesinos de la zona debían cruzar por el lecho del río o utilizar un vetusto puente colgante, poniendo en riesgo sus vidas.
Esta obra, se concretó con el apoyo del municipio, la junta parroquial y la empresa privada, que construyeron las bases, para que el Gobierno Provincial monte la estructura metálica. El puente tiene un ancho carrozable de 4 metros y una capacidad para soportar un peso de hasta cuarenta toneladas.
El presidente del GAD Parroquial de Cerro Azul, Álbaro Buele, recordó que, en época de invierno, cuando el caudal del río subía, extensas áreas de cultivos y zonas ganaderas quedaban aisladas, echando a perder la producción y generando pérdidas económicas.
Muchos habitantes de la zona, según Buele, optaron por migrar a la ciudad ante la falta de infraestructura vial. Ahora, agrega, recuperan la esperanza y las ganas de producir esas tierras.
Armando Aguilar, ganadero de Limón Playa, dice que la obra pone fin a más de 50 años de requerimientos y exigencias, que no habían sido escuchados por autoridades anteriores.
El prefecto Clemente Bravo considera que la producción es clave para el desarrollo de la provincia y hacia allá enfoca la obra pública.
“Es de esta manera, como esta administración de la Prefectura, devuelve la mirada al campo, enlazando zonas productivas y turísticas, reivindicando al sector rural, de donde salen los productos que se consumen en la ciudad”, dijo el prefecto Clemente Bravo.
Comments